Cuando alguien decide emprender y crear una nueva empresa, uno de los componentes fundamentales del plan de negocios debe ser plantear una estrategia de comercio internacional y de exportaciones adecuada y bien definida. En el mundo globalizado en el que vivimos, las exportaciones son una parte fundamental de los ingresos, siendo muy importante para cualquier compañía que el comercio internacional supere al nacional.
Por eso es crucial que toda empresa involucre a sus empleados en la consecución de resultados basados en las exportaciones y que se dé una gran importancia al cuidado de los clientes extranjeros, valorando correctamente las necesidades de financiación que puede reclamar una apertura al comercio internacional.